Introducción
La gastronomía francesa es reconocida a nivel mundial por su exquisitez y sofisticación. Entre sus platos más emblemáticos se encuentra la Soupe à l’Oignon, una sopa de cebolla típica de la región de Francia. Esta deliciosa preparación ha conquistado el paladar de millones de personas alrededor del mundo y hoy te invitamos a conocer más sobre ella.
Origen
La Soupe à l’Oignon tiene sus raíces en la Edad Media, cuando los campesinos y trabajadores franceses la preparaban como una comida económica y sustanciosa para combatir el frío. Con el paso del tiempo, esta sopa se popularizó y se convirtió en un plato tradicional de la cocina francesa.
Ingredientes
Para preparar una auténtica Soupe à l’Oignon necesitarás los siguientes ingredientes:
- 1 kg de cebollas
- 100 g de mantequilla
- 2 cucharadas de harina
- 1 litro de caldo de pollo o carne
- 150 ml de vino blanco
- Queso gruyere rallado
- Rebanadas de pan
- Sal y pimienta al gusto
La cebolla es el ingrediente principal de esta sopa y su calidad es fundamental para lograr un buen resultado. Por eso, se recomienda utilizar cebollas dulces como la cebolla blanca o la cebolla dulce de Fuentes.
Preparación
Para comenzar, corta las cebollas en juliana y colócalas en una olla con la mantequilla derretida. Cocina a fuego medio hasta que las cebollas estén bien caramelizadas y suaves.
A continuación, agrega la harina y mezcla bien para que se integre con la mantequilla y las cebollas. Luego, vierte el caldo de pollo o carne y el vino blanco, y deja cocinar por unos 20 minutos a fuego bajo.
Mientras tanto, corta las rebanadas de pan en trozos y tuéstalos en una sartén con un poco de mantequilla hasta que estén crujientes.
Una vez lista la sopa, sirve en platos individuales y coloca encima los trozos de pan tostado. Espolvorea queso gruyere rallado y gratina en el horno hasta que el queso esté derretido y dorado.
Presentación
La Soupe à l’Oignon se sirve caliente y suele ser acompañada de pan fresco y una copa de vino tinto. Además, se puede decorar con cebollino picado o croutons para darle un toque de color y textura.
Conclusión
La Soupe à l’Oignon es un plato que representa la esencia de la gastronomía francesa, sencilla pero llena de sabor y tradición. Su preparación requiere paciencia y dedicación, pero el resultado final vale la pena. Sin duda, es una sopa que no puede faltar en tu recetario si eres amante de la cocina francesa.